miércoles, 9 de octubre de 2013

Potasio.

Le dije que le quería y luego me fui,
no sé muy bien a dónde.

Me hubiera gustado acostarme dentro
de sus pupilas y hacerme diminuta hasta morir.

Ya daba igual un lugar que otro,
unos labios que otros,
ser o no ser yo o tú o nada.


4 comentarios:

  1. No hay jaula como estas palabras para quienes elegimos este lugar y nos quedamos, sin saber muy bien hasta cuándo.Al final la espera merece la pena.
    Una vez más, gracias por estos versos.
    Sigue el juego.

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    Respuestas
    1. Tal vez quedarse indefinidamente es lo que nos cura y lo que nos hace tanto daño.
      Gracias a ti por tus palabras..

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  2. No creo que cure, pero si el dolor es dulce, lo prefiero antes que salir de la enfermedad.

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  3. Es dejando atrás la enfermedad cuando nos contagiamos del verdadero vacío, mejor estar enfermo de impotencia que de hastío.

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