Nieve,
Todo lo que
veo es nieve
más allá de los confines de tu calor.
Y me estoy helando.
Se me
agrieta la piel y el frío
Me invade
por las heridas que deja
(indirectamente)
tu ausencia.
Se me hiela
el alma y me dicen
Que tengo
que cuidarme más las manos.
Pero ya no
siento nada.
Es demasiado
tarde.
Tengo tanto
frío como si
me lo
hubiesen inyectado directamente en las venas.
“¿Y ahora
qué?”
Ahora
aprendemos a vivir
En
condiciones extremas.
Tú buscas
saciar la sed
Que tú mismo
te produces,
Y yo me
acostumbro
A mi nuevo
estado de hipotermia.
La única
diferencia es
Que aquí ya
es primavera,
Y a ti aún
te confunden
Los oasis
del pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Desahógate conmigo